domingo, 8 de junio de 2008

La azotea

Estás en la azotea de un edificio, al borde, de pie, con los brazos en cruz. Una gota de sudor te recorre la nuca y te ayuda a darte cuenta de que aún sigues ahí. El viento mueve tu pelo y te zarandea a su voluntad. Sigues ahí.

Los ruidos de los coches que pasan debajo están en un segundo o tercer plano, la soledad en el primero. Te gustaría acabar con todos tus problemas dando un paso adelante y cayendo en un abismo de unos cientos de metros que, sin dudarlo, acabaría con tu vida. No puedes porque en el fondo no quieres. Sabes que no eres lo suficientemente valiente como para hacerlo, o quizá, no seas lo suficientemente cobarde como para seguir huyendo. Tienes que enfrentarte a ellos de una vez.
Te entra un cosquilleo en los pies debido a la quietud. Da igual, éso no impide que sigas ahí. ¿Merece la pena moverse?

Hace un tiempo que las cosas comenzaron a empeorar, todo se tiñó de gris y empezaste a plantearte el día de hoy. Ahora, que estás donde planeaste, no todo está tan claro, y la voz de un niño te grita que te apartes, que no es buen lugar para jugar.
Por otro lado te recuerdas que estás harto de disimular, de sonreír llorando y de que, la luz, ilumine las vidas de los demás pero la tuya no. Entonces piensas en ella, en lo que querría para tí, y dejas de verle sentido a ésta situación.
Como si el mero hecho de recordarla hubiera activado tu resorte, comienzas a dar pasos hacia atrás. Te haces consciente de lo cerca que estuviste de morir, de dar portazo a la vida y a la gente que quieres, y te sientes mal por haberlo intentado.
Un compañero de trabajo ha subido a fumar sin tener idea de lo acontecido, te da una palmadita en la espalda y dice: "creo que hoy es un buen día para dejar de fumar, pero no en este momento, verdad?", sonríe y enciende un pitillo.
Ha resumido en una frase tu vida: podrías mandarlo todo a la mierda, pero, de momento no, aún no.




La pena dura tanto
como tú quieras seguir llorando,
y aunque tú revises tu interior,
siempre te queda algo,
que dice que ésto es para largo.

3 comentarios:

  1. Hola!
    Gracias por el post!
    Me han encantado tus aportaciones.
    Las usaré!
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. uff! yo creo que a veces yo he querido hacer eso, pero despues piensas: ¿ estas loca o que? es tu vida ..es lo mejor que tienes. No vale la pena o quizas si. Pero en ese momento crees que la muerte es lo peor, pero cuando estas cerca de ella te arrepientes de las espideces que como esa has pensado en hacer.

    Si esa persona que tu describe despues cuando saliera a la calle,le pasara algo y se salvara la vida...estaria arrepentida de haberlo hecho..te lo digo yo.

    hacia tiempo que no me metia por aqui.

    Con lo de respecto a mi actualizacion, tu tubistes la suerte de tenerlo aunque sea poco, pero yo ni eso. Imaginate una pirámide, yo a el lo tengo en la cúspide, pero es imposible llegar a el.Por mas que lo intentes, por mas que todo...imposible.

    ResponderEliminar
  3. uff! yo creo que a veces yo he querido hacer eso, pero despues piensas: ¿ estas loca o que? es tu vida ..es lo mejor que tienes. No vale la pena o quizas si. Pero en ese momento crees que la muerte es lo peor, pero cuando estas cerca de ella te arrepientes de las espideces que como esa has pensado en hacer.

    Si esa persona que tu describe despues cuando saliera a la calle,le pasara algo y se salvara la vida...estaria arrepentida de haberlo hecho..te lo digo yo.

    hacia tiempo que no me metia por aqui.

    Con lo de respecto a mi actualizacion, tu tubistes la suerte de tenerlo aunque sea poco, pero yo ni eso. Imaginate una pirámide, yo a el lo tengo en la cúspide, pero es imposible llegar a el.Por mas que lo intentes, por mas que todo...imposible.

    ResponderEliminar

Si todo es imperfecto en este mundo imperfecto, el amor es lo más perfecto de todo precisamente por su perfecta imperfección.