14/02/2011
3 a.m.
"[...] Te pediría que me dejases llorar tranquila, sin embargo, cuando me quiero dar cuenta, no estás a mi lado y no lloro porque no puedo, porque no quiero creérmelo, porque me duele el alma de tal modo que me paraliza y me cuesta respirar. Sin embargo, a pesar de todo, te cedo ese tiempo que me has pedido, aún sabiendo que si me dijeras un porqué, yo sería capaz de dormir esta noche, bien por agotamiento, bien por tranquilidad. La paz que te decía antes que me aportaba el saberte en mi vida. Y esa calma se basaría en que al menos tendría claro que tú habías tomado esa decisión en base a tus creencias. Sabría que tú dormirías bien y eso me haría sentir menos mal que ahora, que por ignorancia me ahogo en este mar de dudas.
Me has dejado tirada en medio de una tormenta en el océano y no me has permitido coger ni un flotador, ni tan siquiera me has indicado adónde nadar para llegar a la orilla. Aquí, en el lugar que más temor me genera, el desconcierto, te despediste a la francesa con la gracia flamenca de un buen silencio. Y olé.
Batman espero que me eche de menos, aunque sólo sea porque recuerde que, una vez, hubo una humana que iba cada cierto tiempo por sus dominios. La misma humana que le acariciaba con cariño cuando ponía ese gesto absurdo entre la rabia y el llanto. Batman…
El 31 de Diciembre conseguiste que mi vida tuviera sentido, que las noches perfectas existieran en algún lugar más que en mis sueños. Que cada mensaje me hiciera volar y llegar a Noia, a tu casa, a tu habitación y que cada centímetro que me acercaba, una lágrima de felicidad recorriese mi cara. Hoy, que ya me has dado billete de vuelta directo, que no soy nada, como tampoco lo era al comienzo de aquella noche, vuelvo a llorar e intento recordar tu risa para evitarlo, pero parece que el efecto es el contrario. Tu risa será mi llanto.
Hoy que me dejaste y te has quedado con el aire, los abrazos, los besos, los ¿quién te quiere a ti? y los minutos sin dejar de mirarnos, deberías de tener el valor para terminar de tirar de la soga y ahogarme, porque esto es agónico y no te puedes hacer a la idea de cuánto. No quiero cuidarme el corazón más, también te lo has quedado tú, así que apuñálalo, golpéalo, haz lo que sea que tengas que hacer para romperlo del todo. No tengo fuerzas, ni ganas, ni posibilidades para curarlo más.. ya no hay razones.
Apareciste en el momento justo, el día que Edu volvió a Galicia comencé a hablar contigo, el día en el que volví a dejar una parte de mí a la vista, apareciste tú y aprovechaste el momento bien porque has conseguido volverme a romper. Pero no habrá más veces, más que nada, porque ya no queda nada que destrozar. Felicidades, has sido el último. [...]"
http://www.youtube.com/watch?v=clq01TXQR0s
ResponderEliminarNo ayuda, pero es tan tan buena.
Espero que no haya demasiada verdad en lo que dices, si es así, muchos ánimos!
Pues sí que era real tu amenaza de partir.... :(
ResponderEliminarGet baaaaack, get baaaaaack!
Anna K. Gracias por la canción. Ésa es justo la última que él me dedicó. Es preciosa. Todo el texto he de decir que es verdad, desde la primera letra a la última; pero como pone en la fecha de eso ya hace un año y ahora todo es de otro color.
ResponderEliminarbitelino ¡Ya estoy de vuelta! :P